Dime qué tipo de edificio tienes y te diré qué tipo de impermeabilización de tejados necesitas

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La impermeabilización de tejados es un aspecto fundamental en el mantenimiento de cualquier edificio. Cada tipo de edificio presenta desafíos y necesidades únicas en cuanto a su impermeabilización. Los edificios residenciales, comerciales e industriales tienen características distintas que requieren enfoques específicos.  

En este blog distinguiremos los diferentes tipos de edificios y las diferentes necesidades de impermeabilización que tienen. Además, te contamos los factores que debes tener en cuenta para que la impermeabilización de cualquier tipo de edificio sea un éxito rotundo. 

Tipos de edificios y sus necesidades de impermeabilización 

Edificios residenciales 

Los edificios residenciales pueden contar con cubiertas inclinadas o planas, optando por uno u otro tipo generalmente dependiendo de la zona geográfica donde se ubiquen. En la zona norte de España y en zonas de montaña, las cubiertas más habituales son las inclinadas. Estas cubiertas están diseñadas para facilitar la canalización del agua de lluvia hacia los desagües o distribuir el peso de la nieve, evitando acumulaciones que puedan filtrarse. Sin embargo, las tejas o materiales de cobertura pueden deteriorarse con el tiempo, convirtiéndose en puntos vulnerables para la filtración de agua. Además, los espacios bajo cubierta suelen ser habitables, y al estar situados justo debajo del tejado significa que cualquier filtración podría causar daños en el interior de las viviendas y empeorar su habitabilidad y salubridad. 

Tipos de impermeabilización recomendados 

Para edificios residenciales con cubiertas inclinadas de teja o pizarra, las placas asfálticas bajo teja son una opción muy efectiva. Estas placas se aplican sobre el aislamiento de la cubierta, o sobre su soporte si no existiera un material aislante, y son altamente duraderas, proporcionando una barrera muy efectiva contra las filtraciones, además de proteger frente a la humedad gracias a la ventilación que aporta su formato ondulado. Otro material habitualmente utilizado son las láminas impermeables transpirables, solo que esta opción está más recomendada para cubiertas con mayores pendientes, ya que sus propiedades impermeables no son tan efectivas como las de las placas asfálticas onduladas. 

En cambio, en edificios residenciales con cubiertas planas, una opción muy interesante es el uso de membranas de EPDM (etileno-propileno-dieno monómero), que son resistentes a los rayos UV y a los cambios de temperatura. Estas membranas son flexibles y se adaptan bien a los distintos remates, ofreciendo unos sellados muy consistentes y duraderos. Estas membranas pueden dejarse a la intemperie o cubrirse con otros materiales como grava o incluso realizar cubiertas ajardinadas. 

Edificios históricos e institucionales 

Los edificios históricos abarcan a un amplio y diverso conjunto de edificaciones, con diversos estilos arquitectónicos y técnicas constructivas, aunque, en lo referente a sus cubiertas, suelen ser cubiertas inclinadas de teja. Al igual que ocurre con los edificios residenciales, los elementos que forman la cobertura del tejado pueden deteriorarse con el tiempo, y facilitar la filtración de agua hacia el interior de la cubierta. En este tipo de edificios, los espacios bajo cubierta no suelen ser habitables, por lo que muchas veces no precisan de aislamiento térmico, salvo cuando se recuperan para una utilización posterior como ocurre con algunos edificios institucionales históricos.  

Consideraciones para la impermeabilización 

A la hora de actuar sobre un edificio histórico se deben tener en cuenta ciertas cuestiones clave como la conservación de su carácter e integridad histórica, la adaptabilidad a los materiales originales y el bajo impacto en las estructuras y demás elementos del edifico. Además, dotar al tejado de una impermeabilización segura es muy importante para garantizar la protección y preservación del patrimonio cultural que este tipo de edificios alberga. Al tratarse, en su mayor parte, de cubiertas inclinadas de teja, en este caso las placas asfálticas bajo teja vuelven a ser una opción ideal por su adaptabilidad y perfecta combinación con sistemas de tejado tradicionales como la teja cerámica árabe, mientras que se evita sobrecargar la estructura y se garantiza una impermeabilización bajo teja de gran durabilidad y eficacia. Si quieres saber más sobre cómo rehabilitar con éxito la cubierta de un edifico histórico puedes ver este otro post de nuestro blog. 

Edificios comerciales 

Los edificios comerciales suelen estar compuestos por cubiertas planas con áreas extensas que pueden acumular agua durante las lluvias. Además, estos edificios a menudo experimentan un tráfico intenso, ya sea de peatones o coches, y deben soportar el peso de equipos de mantenimiento. Esto puede provocar un desgaste más rápido de los materiales de impermeabilización y aumentar el riesgo de daños. 

Consideraciones para la impermeabilización 

Para edificios comerciales, la durabilidad y la resistencia al tráfico son factores clave a considerar al elegir un sistema de impermeabilización. Las membranas de PVC son una opción popular debido a su precio más competitivo ofreciendo un buen comportamiento al fuego y a rayos U.V. También se pueden considerar las membranas asfálticas autoprotegidas, que ofrecen una aplicación sencilla y económica, que puede adaptarse a las formas irregulares de las cubiertas de los edificios comerciales. Otra opción siempre disponible es la de la cubierta lastrada, que requieren de una capa de impermeabilización previa, pudiendo optar por distintos materiales impermeabilizantes. 

Edificios industriales 

Entre los edificios industriales podemos encontrar distintos tipos de construcciones, optando por las cubiertas planas o las inclinadas en función de la zona geográfica. Además, estas cubiertas pueden estar sujetos a condiciones extremas, como la exposición a químicos, aceites u otros contaminantes. Esto puede acelerar el desgaste de los materiales de impermeabilización y requerir soluciones específicas. 

Desafíos específicos 

Para los edificios industriales, la resistencia a productos químicos y la durabilidad son esenciales. En el caso de las cubiertas planas, las membranas de TPO (poliolefina termoplástica) son una gran opción en estos entornos, ya que son altamente resistentes a la intemperie y ofrecen unas prestaciones muy buenas a lo largo del tiempo. En cambio, en las cubiertas inclinadas de edificios industriales se suele optar por materiales de una sola capa como los paneles sándwich metálicos y las cubiertas traslúcidas mediante paneles plásticos de policarbonato. 

Soluciones de impermeabilización 

Además de las membranas de TPO, los edificios industriales pueden beneficiarse de sistemas de impermeabilización con múltiples capas y refuerzos. Esto puede incluir membranas asfálticas con capas de protección adicionales, como láminas de aluminio. Estas soluciones proporcionan una protección robusta contra los elementos y los desafíos específicos de los entornos industriales. 

Factores que debes tener en cuenta 

Al elegir qué tipo de sistema de impermeabilización de tejado es el más adecuado para tu proyecto, siempre es importante analizar ciertos factores que, sin duda, van a influir en su eficacia y en su durabilidad. 

Climatología y ubicación geográfica 

El clima habitual de la región donde se encuentra el edificio desempeña un papel crucial en la elección del tipo de impermeabilización. Se deberán tener en cuenta tanto factores pluviométricos como de exposición a fuertes vientos o posibilidad de nevadas. En función de estos aspectos, se debe optar por sistemas de impermeabilización altamente resistentes al agua y al peso, y cuyo sistema de fijación ofrezca buenas garantías de sujeción. Las zonas con altas temperaturas o exposición intensa al sol pueden requerir materiales que sean reflectantes para evitar el sobrecalentamiento del tejado. Además, las regiones con cambios extremos de temperatura entre el día y la noche pueden beneficiarse de materiales flexibles que puedan expandirse y contraerse sin deteriorarse o romperse. 

Dimensiones, geometría y pendiente de la cubierta 

El tamaño, la forma y la pendiente de la cubierta o tejado también son factores importantes a considerar. Lo normal es que cuánta más superficie tenga un faldón de cubierta o tejado más material y solapes entre elementos impermeabilizantes necesite. En cubiertas de teja, esto también implica una mayor necesidad de piezas de ventilación y pendiente recomendada. De hecho, una pendiente pronunciada siempre va a facilitar el drenaje del agua, pero en casos extremos también puede ser más complejo y costoso de impermeabilizar debido a la dificultad de instalación. Por otro lado, las cubiertas planas o los tejados con una pendiente baja van a acumular agua más fácilmente, por lo que demandan un sistema de impermeabilización especialmente diseñado para evitar filtraciones y acumulaciones con bajas pendientes.  

Finalmente, la geometría de una cubierta o tejado tiene implicaciones directas en la complejidad para impermeabilizarla, implicando tener que realizar una mayor y más diversa cantidad de remates y resolver encuentros entre distintos elementos constructivos. En función del tipo de sistema de impermeabilización que se escoja, se facilitarán estas labores y/o se tendrán mayores garantías y seguridad de que no habrá problemas futuros por falta de adhesión en estos puntos conflictivos. 

Presupuesto 

Evidentemente, el presupuesto disponible siempre es un factor crítico en cualquier proyecto de construcción o rehabilitación. Es importante equilibrar la calidad y durabilidad del sistema con los costes involucrados. Algunas opciones de impermeabilización de cubiertas planas, como las membranas de PVC o TPO, pueden tener un coste inicial más alto, pero ofrecen una vida útil prolongada y menores costes de mantenimiento a largo plazo. En cambio, las opciones más económicas como las membranas asfálticas pueden ser una solución adecuada para edificios con presupuestos limitados, pero es crucial considerar también los costos de mantenimiento y reparación a lo largo del tiempo.  

En cuanto a los costes de la impermeabilización de tejados, los sistemas de placas bajo teja como ONDULINE BAJO TEJA DRS son una opción asequible si se mira desde el punto de vista de la garantía de impermeabilización y durabilidad. Se trata de un material muy resistente y eficaz, que actúa como una segunda capa de protección ante cualquier fallo de la cobertura de teja, incluso desde pendientes bajas (mínimo 15%). Por otro lado, existen otros materiales impermeabilizantes para tejados más económicos como las láminas impermeables transpirables, pero estas no ofrecen las mismas prestaciones impermeables ni garantías. 

Si quieres conocer más información sobre la impermeabilización de tejados para profesionales, te invitamos a visitar nuestro blog. Si tienes alguna duda o quieres hacernos una sugerencia no dudes en contactar con nosotros.